POR CARLOS NÚÑEZ
Hay que dejarnos de cuentos, el recién terminado Premundial de baloncesto dejó un sabor amargo a toda la afición dominicana que gusta y siente por esta disciplina en el país.
Miles serán las conjeturas acerca de cual fue la causa de la no clasificación del conjunto dominicano, sin embargo lo mas importante en este momento no es eso, sino cual será el rumbo del basket criollo de ahora en adelante.
Mas importante es saber en manos de quien ó quienes estará el futuro de esta disciplina, y si podrán tomar la lección de esta experiencia sin sabores que dejo la eliminación de un equipo que nunca pudo poner todas sus condiciones individuales juntas (juego de equipo), por lo que nunca pudieron dar el saltito que nos faltó para lograr el éxito.
Las autoridades del baloncesto dominicano deberían tener bien claro, que el hecho de tener logros o fracasos a nivel internacional con la selección de mayores, no es un reflejo de cual es la situación real del deporte del aro y el balón en la Republica Dominicana. Teniendo en cuanta la precariedad institucional que arropa este deporte, podemos entender la falta de preparación de los atletas de esta disciplina a todos los niveles.
La FEDOMBAL necesita urgente un plan de acción a mediano y largo plazo, que permita al baloncesto nacional conseguir objetivos esenciales para el avance de esta disciplina como son: desarrollar el talento joven en el aspecto físico y técnico, implementación de una verdadera gerencia deportiva, capacitación a nivel dirigencial, entrenadores y preparadores físicos capacitados en el extranjero, y que a través de una escuela nacional de baloncesto ellos transmitan sus conocimientos y fundamentos del juego a los relevos generacionales de nuestro país.
Solo así se podría erradicar de raíz el mal de fondo y no de forma que atraviesa el baloncesto dominicano por los siglos de los siglos… Amen.
Y VALE:
Lo cierto es que debemos decir las cosas en su justa dimensión, los puntos tocados por mí anteriormente de ninguna manera borra lo positivo de la gestión que realizó la federación para aglutinar el núcleo de jugadores que fueron al Premundial.
Independientemente de las cosas que sucedieron en Puerto Rico y que hay que corregir de una buena vez, no es menos cierto que de todo el desastre que fue nuestra selección hay siempre algo que resaltar, y me voy mas lejos, debemos aprender de esos errores.
Un sí valioso a la gestión de Rafael Uribe y Cesar Saint Hilare, que fueron integrados al proyecto de selecciones nacionales y que realizaron un buen papel en sus funciones, ojala sigan aprendiendo de sus errores, pero lo hicieron bien.
Bueno el trabajo de Pedro Pablo Pérez contactando y tratando de motivar a jugadores para que se integren a la preselección nacional, aunque con un par de asteriscos en sus funciones, no se ligan los intereses particulares con una gestión federativa amigo Pedro Pablo, eso siempre se presta a especulaciones.
Y finalmente nos dimos cuenta de la entrega, vergüenza, desprendimiento y cooperación, además de orgullo y patriotismo, como los de Francisco García, Al Horford y Charlie Villanueva, entre otros que bajo luces, sombras y mal intencionados comentarios con destellos de algunas verdades, dieron la cara por nuestro país, y que vieron malograda sus aspiraciones por un grupito de malas pulgas que siempre pululan alrededor de la buenas intenciones.
Seguiremos luchando por el crecimiento del baloncesto desde nuestra posición en los medios de comunicación, sin importar las verdades que tengamos que decir, no importa quien esté de acuerdo o no, solo lo haremos de acuerdo a nuestro criterio.
¡¡¡¡¡Aun podemos salir adelante!!!!!!
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