HAY QUE DETENER LA LOCURA EN NUESTRO BALONCESTO SANJUANERO

En tiempos no muy lejano los jugadores de baloncesto se sentían orgullosos de lucir las chaquetas de sus respectivos equipos con honor y gallardía. Para ellos defender el nombre, el color y la barriada que representaban era un asunto de honor. Esto se ha venido perdiendo. Desgraciadamente.


La locura comenzá en ese afán desmedido de ganar un torneo aunque para ellos haya que sacar por la puerta trasera a los jóvenes que desde minibasket han venido llenando de orgullo al conjunto.

Ya no importa la cualidad del jugador. La practica del momento es "caerle atrás" a una serie de jugadores de otros equipos ofreciéndole dinero y dádivas sembrando en ello una conciencia mercantilista que no se compadece con la calificación que tiene la Federación Dominicana de Baloncesto de nuestros torneos.

Hubo un Club que nos estaba ofreciendo 5 jugadores que han venido desde mini-basket con ellos a cambio de un jugador que aunque viviendo en su propia barriada nunca le ha interesado practicar con ellos sino con nosotros. A modo de ejemplo

Hay que conquistar un torneo hoy aunque el equipo quede destruido para mañana. Esa parece la irracional conducta. Ejemplo de ellos tenemos.

Particularmente, personeros de otros equipos han tratado de minar nuestra unidad interna con jugadores que se han desarrollado en nuestro club.

En el caso nuestro, eso no surtido mucho efecto. Pero no dejan de aparecer los "buitres" que con dos pesitos creen que todo el mundo se vende. Son los mismos que le ofrecen dinero a los jugadores para que no le jueguen con toda intensidad cuando puedan enfrentarse. Estamos matando nuestro baloncesto lentamente. Ojala mañana no sea tarde.

Lo lamentable es que todo esto esta pasando y los actuales dirigentes de la Asociación de Baloncesto de nuestra provincia parece no enterarse o no querer hacerlo.

Al final, la mayoría de esos clubes terminan incumpliendo  a los jugadores que adquieren, pues le hacen ofrecimientos muy por arriba de sus verdaderas posibilidades

Pero no solo eso sino que le elevan innecesariamente el ego a una serie de atletas los cuales se sobre estiman por arriba de sus condiciones y le plantean a los clubes exigencias imposibles de complacer, fruto de la falta de gerencia como se organización los torneos superiores, los cuales económicamente no dejan de ser un verdadero desastre.

Nunca hemos hecho obstentacion de los grandes recursos que otros dicen tener, pero al final de cada torneo, nuestros jugadores se sienten complacidos del trato dispensado tanto en el tabloncillo como en lo económico, incluyendo el personal de apoyo.  Y no salimos con deudas.Mas claro aun, al final, nuestros jugadores llegan incluso al doble de lo que otros clubes le consiguen a sus principales prospecto. Y no hacemos tanta bulla ni andamos atrayendo jugadores llenándole los ojos de cuentos.

No nos extrañemos si este lamentable espectáculo se traslada a las categorías menores. Es decir que no es de extrañar que en los próximos torneos minibasket también haya que comprar niños para jugar mediante dádivas y "caramelos" retorciendo la mentalidad de los infantes. Algo tendrá que hacer nuestra Federación. Es urgente.

Por cierto, los clubes que están recurriendo a este feo procedimiento son los que no desarrollan el baloncesto inicial. Las canchas donde practican solo se siente vida cuando hay torneo superior; pasado este periodo nadie se preocupa por la formación de nuevos talentos. Dirán ellos para que, si lo que hay que hacer es procurar que otros clubes hagan ese trabajo que con "cuarto" ese problema lo resolvemos. Barbaros!.

Finalmente, entendemos que esta sinrazón hay que detenerla a tiempo, porque si no sera inmanejable. Y entonces, estaríamos matando el principal entretenimiento deportivos que tienen las familias sanjuaneras. Hemos dicho.